Estuve visitando las zonas afectadas por el friaje. Pude llegar a varios caseríos alto andinos de Puno. “¡Oh sorpresa!” dije, al ver un “POMPOSO COBERTIZO” El mismo que tenía una pared de adobe y un techo de calamina, que parecía papel arrugado sobre maderas chuecas, reforzadas con palos de eucalipto. Muy bien pintados por dentro y afuera. Según se sabe, costarían 5 mil soles. Estos cobertizos, sirven para albergar animales dentro de ella; de tal manera protegerlos de las inclemencias del tiempo. Aparentemente muy bien construido, en medio de la extrema pobreza. Me acerque mas y mas, hasta lograr conversar con una pobladora. Era una madre de familia. Tenia los pies casi descalzos y los labios asemejándose a las grietas de los andes.A nuestro arribo salieron dos niños con sus rostros sonrojados, que muy adoloridos sonreían. Las rajaduras y heridas de sus mejillas, eran producto del férvido frio; Me sorprendió cuando ellos salieron de una casucha de piedras. Conocido como “ch`uclla” que apenas tenia un techo de paja y plástico, con una puertecilla de retazos de latas, que tintineaban con el soplo del viento.
Estas casuchas de piedra estaban justo a lado de los llamados “cobertizos pomposos” que habían sido construidos en el periodo de emergencia 2007. _ ¿Es de tu perrito esta casucha? Pregunté a la señora, ella sonrió y dijo que: _“no, ahí dormimos junto con mis hijitos” “Uno de ellos falleció ahí dentro, hace dos semanas” [derramó lágrimas agachando la cabeza]. Aquel momento; no podía contenerme, [casi me recuerda mis momentos críticos de mi niñez]. Abrase a la señora quien me invito a desayunar chuño sancochado con “cadáver de alpaca”, muerto por el intenso frio; Pregunté, si habían recibido apoyo de las autoridades. Ella respondió muy orgullosamente que si, mostrándome el “pomposo cobertizo”, donde aguardaban sus animales preñadas y crías de alpacas. También me mostro una serie de ropa donada. Curiosamente, eran trajes de verano (Bikinis, trusas, polos y otras ropas íntimas). De pronto se hoyó toser a uno de sus niños, era el mas pequeño quien esputó saliva, con un poco de sangre. Aquella madre abrazó a su hijo y le dio de tomar un matecito de muña, que en quechua le decía: “Ama waqaychu wawitay, Yus yayanchis yanapawasun” (no llores mi hijo que Dios nos va ayudar) Ambos se pusieron a derramar lagrimas abrazándose muy fuertemente.
Al alejarme del caserío entre mis pensamientos me pregunte ¿Por qué es injusta la emergencia climática? ¿Por qué un buen cobertizo para los animales y una simple casucha de piedras para el ser humano? ¿Dónde esta el equilibrio de la solidaridad y la atención por emergencia? En nombre de la pobreza y el extremo frio, muchas instituciones publicas y privadas reciben millones de soles para que estos inviertan en acciones de prevención, atención y rehabilitación de zonas afectadas por el friaje; Sin embargo los corruptos que dirigen estas instituciones constantemente sobrevaloran la construcción de cobertizos y para “concha” se dan el lujo de atender con materiales de pésima calidad. Es decir envés de comprar materiales de construcción resistentes a los factores climatológicos del medio rural; Prefieren comprar materiales indurables; cuyos proveedores de materiales, suelen ser familiares y allegados de estos funcionarios inmundos, que reciben millones de soles en nombre de la emergencia; En nombre de la pobreza.
Nuestros hermanos rurales suelen conseguir el calor, frotándose las manos con un poco de aliento de boca; Pero hay mas quienes se frotan las manos esperando que Puno se declare en emergencia, de tal manera recibir donaciones y presupuesto por emergencia, año tras año; de tal manera gastarlos sin control alguno.
Si bien ya se conoce la temporada de eventos climatológicos en la región de puno, debería de implementarse un sistema de prevención y actuación oportuna, ante las emergencias climáticas; el cual podría consistir en un “programa de inversión publica integral” en prevención de los efectos del friaje, y no solamente dirigido para proteger los bienes materiales y económicos del poblador rural, sino la esencia del bienestar social. Es decir no solo cobertizos para los animales, sino una VIVIENDA RURAL para nuestros hermanos rurales quechuas y aymaras; De tal manera, pueda equilibrarse la solidaridad; haciéndose mas justa con lo fundamental que es el ser humano. Palabra del Pueblo.
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