FUSION DE FACULTADES : IMPOSICION SIN CRITERIO

Por. Roger C. Villasante

Tantos magísteres y doctores en nuestra universidad para nada, como es posible que esta asociación de compadres solo quieran imponer sin ningún sustento ó estudio técnico la “fusión de facultades”. Como es posible que teniendo especialistas dentro de nuestra primera casa de estudios no se hayan dado la molestia de elaborar un diagnostico que demuestre indicadores de la situación actual de la universidad sobre las cuales debieran tomarse las decisiones y las medidas pertinentes, dentro de una alternativa que demuestre técnica, política, económica y académicamente los costos y beneficios de esta política arbitraria. Pareciera que Martha Tapia y sus secuaces solo obedecen al interés político economico que les apresura a concretizar esta condicionante que les impuso el gobierno aprista, solo porque los docentes serían homologados en sus haberes siempre en cuando cumplan al pie de la letra el chantaje gubernamental. Es como si el régimen les habría pedido la cabeza de sus mismos colegas que trabajan en la modalidad de contratados, para que el presupuesto de sus sueldos, sirvan como fuente de incremento y homologación de salarios del personal nombrado y obsoleto. Una mala manera de de beneficiarse a costa de otros, sin darse cuenta que el gobierno quiere sacar correa del mismo cuero.
Sin embargo, debemos señalar que; no está mal que se dinamice y optimice los recursos en la gestión universitaria a través de procesos establecidos para mejorar los servicios educativos universitarios como es la “fusión de facultades en macrojurisdicciones”, lo que esta mal es que no se cumpla los debidos procesos para una política de toma de decisiones, debiendo iniciarse en un expediente competente ó técnico, que muestre indicadores claves sobre las cuales se implemente un trabajo deliberativo, participativo y democrático, con los estamentos pertinentes del gobierno universitario, y paralelo a ello sociabilizar dentro de la población universitaria, los costos y beneficios económicos y sociales que traerá consigo la “fusión de facultades”, de tal forma se evite especulaciones por parte de sectores involucrados en la gestión universitaria.

¿Decisión Política ó Técnica?
En el aspecto educativo. Mas allá de tomar una decisión unilateral y política, debieran primar aspectos técnicos que determinen la viabilidad técnica, política, social, académica, y administrativa del proceso de fusión de facultades, la misma que no debe estar convenida a un ratio numérico particular de relación Autoridad – Docente – Alumno, si no a factores condicionantes e imprescindibles en el desarrollo universitario, tales como la capacidad de la infraestructura, Disponibilidad y capacidad de recursos humanos, Procesos de gestión administrativa, Equipamiento, Tecnología, calidad de sílabos académicos y otros factores que ameriten su intervención, obtención ó gestión, mediante un programa de desarrollo y fortalecimiento institucional de la universidad, de tal forma concretizar el logro de objetivos que contribuyan a un fin de la visión del plan de desarrollo universitario.
Finalmente debo de manifestar que todo tipo de cambios generan efectos negativos y positivos, y la implementación o imposición de una política debiera de considerar algunos planes de contingencia, antes – durante y después de su aplicación, que ayuden a mitigar los efectos negativos, por cuanto se presume que si se prosigue con este capricho y en vísperas a las elecciones de decanos. La universidad sufrirá una seria crisis que aletargará las actividades académicas, perjudicando a una mayoría de estudiantes, quienes siempre resultan siendo los más perjudicados. Palabra del Pueblo.